
Dentro de ABC Limpiezas de Incendios sabemos que un siniestro deja tras de sí un escenario complejo y lleno de residuos difíciles de tratar. La ventilación inicial no es suficiente para devolver la seguridad y la limpieza a los espacios. Por eso hemos desarrollado protocolos científicos y técnicos para la recuperación total de inmuebles afectados por Limpieza por Incendio en Sevilla.
La meta siempre es la misma: eliminar por completo el hollín, la ceniza y los contaminantes, devolviendo a cada estancia un ambiente saludable y libre de olores. Si tu vivienda, oficina o comunidad ha sufrido un siniestro, te acompañamos paso a paso cómo abordamos la limpieza profesional tras un incendio.
En España, los incendios más comunes suelen estar relacionados con cortocircuitos, sistemas de calefacción o accidentes en cocinas. Aun así, los daños no solo provienen del fuego: el humo y el hollín pueden penetrar en paredes, techos y conductos de ventilación, generando un entorno altamente tóxico.
El hollín está compuesto por partículas microscópicas de carbono, mientras que la ceniza es el residuo mineral de la materia ya quemada. Estos residuos son extremadamente dañinas para la salud y las superficies, y requieren un tratamiento técnico específico y urgente.

En viviendas y comunidades de vecinos de Sevilla, los daños más comunes tras un incendio incluyen:
Cada uno de estos efectos requiere un tratamiento distinto. En ABC Limpiezas analizamos cada caso de manera individual antes de iniciar la descontaminación, garantizando que el proceso sea seguro, eficiente y conforme a las normativas ambientales.
Limpiar después de un incendio va mucho más allá de una simple desinfección. Se trata de un proceso estructurado que exige equipo técnico especializado y conocimiento químico. En ABC Limpiezas seguimos un protocolo riguroso:
Primero, inspeccionamos el área afectada para determinar el tipo de humo, materiales dañados y extensión del siniestro. Cada siniestro presenta características únicas, por eso personalizamos la metodología según la temperatura de combustión, la ventilación y los materiales presentes.
El informe técnico que elaboramos sirve también para la aseguradora, agilizando las gestiones administrativas y garantizando una compensación justa.
Una vez diagnosticado el daño, se procede a la eliminación segura de los restos y mobiliario afectado. Usamos sistemas de aspiración con filtros HEPA que impiden que las micropartículas se propaguen al resto del inmueble.
Este proceso es esencial para detener la corrosión y el olor persistente. Cuando el incendio afecta a zonas compartidas, coordinamos la gestión de residuos con el ayuntamiento o la empresa de recogida autorizada.
Aquí comienza la fase crítica del proceso. Aplicamos detergentes enzimáticos y soluciones biodegradables que disuelven el hollín sin dañar las superficies. El tratamiento de choque con ozono y microdifusión elimina las moléculas volátiles responsables del mal olor.
Si la contaminación llega a zonas ocultas o técnicas, aplicamos encapsulantes y ventilación controlada para evitar recontaminaciones. Nos aseguramos de que el aire vuelva a niveles saludables antes de permitir la reocupación del espacio.
El hollín es conductor eléctrico. Nuestros especialistas en electricidad y climatización desarman, limpian y reinstalan los componentes afectados. Utilizamos disolventes dieléctricos aprobados por la UE.
La limpieza de conductos de aire es igualmente esencial. Una mala intervención podría propagar el olor a toda la vivienda o edificio. En ABC Limpiezas contamos con tecnología de inspección por cámara y cepillado robotizado.